Kyūshoku (給食) es el almuerzo que ofrecen a los estudiantes en las escuelas japonesas. Se trata de diferentes platillos para cada día en los que incluyen una gran variedad de alimentos. Entre ellos carne roja, carne blanca, pastas, arroz, y por supuesto, frutas y una buena cantidad de vegetales. En cuanto a la bebida, casi siempre es yogurt o leche.

Los platos se piensan y organizan siempre con mucha antelación, y los estudiantes los pueden encontrar bien detallados en una tabla que contiene el “menú escolar”, en la cual pueden fijarse que van a comer cada día.

Los padres deben pagar por una inscripción de aproximadamente 500 yenes para que el estudiante tenga acceso al almuerzo escolar durante el mes. Aunque en ciertas escuelas, los estudiantes también tienen la posibilidad de traer su propio almuerzo, un detalle que se ve con mucha frecuencia en series o películas en las que llevan su típico Obentō.
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El almuerzo escolar está pensado principalmente para los estudiantes de primaria, ya que están en la edad en la que la alimentación equilibrada es clave para su crecimiento. Aún así, actualmente se puede observar que también lo están implementando en muchas escuelas secundarias.
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Cuantas delicias y proteinas!